Mensaje

Ha empezado otra vez, se ha cambiado hasta el nombre. El numero de sus dias ha contado. La lista de pendientes repasó. Camina firme por las calles. No le conocen mas, sus memorias ha extirpado, no confía ni en sí mismo. Sus cercanos consternados, sentimientos desconoce. A propios y extraños analiza, su mirada en los cielos, el dolor lejos esta, la muerte lo ha ignorado (escapando por si misma) dicen que vino del cielo que el libro del juicio tomo prestado. Que su fuerza no es la misma. La lluvia lo lastima.

IF (Replicando...)

Si puedes llevar la cabeza sobre los hombros
  bien puesta,... cuando otros la pierden y de ello
  te culpan;
  Si puedes confiar en tí cuando todos de tí dudan, ...
  pero tomas en cuenta sus dudas;
  Si puedes esperar sin que te canse la espera,
  o soportar calumnias sin pagar con la misma
  moneda,
  o ser odiado sin dar cabida al odio, ...
  y no por eso parecer demasiado bueno o sabio;

  Si puedes soñar sin que tus sueños te dominen;
  Si puedes pensar sin que tus pensamientos sean
  tu meta;
  Si puedes habértelas con Triunfo y Desastre
  y tratar por igual a ambos farsantes;
  Si puedes tolerar que los bribones 
  tergiversen la verdad que has expresado
  y la convierten en trampa para necios,
  o ver en ruinas la obra de tu vida
  y agacharte y reconstruirla con viejas
  herramientas;

  Si puedes hacer un atado con todas tus
  ganancias
  y arrojarlas al capricho del azar,
  y perderlas y volver a empezar desde el principio
  sin que salga de tus labios una queja;
  Si puedes poner al servicio de tus fines el corazón,
  el entusiasmo y la fortaleza, aún agotados,
  Y resistir aunque no te quede ya nada..,
  Salvo la voluntad que te diga ¨Adelante!¨;

  Si puedes dirigirte a las multitudes sin perder la
  virtud,
  y codearte con reyes sin perder la sencillez;
  Si no pueden herirte amigos ni enemigos;
  Si todos cuentan contigo en demasía;
  Si puedes llenar el implacable minuto,
  con sesenta segundos de esfuerzo denodado,
  Tuya es la Tierra y cuanto en ella hay,
  Y más aún, Serás un hombre, hijo mío!

Rudyard Kipling